Antecedentes: los problemas de salud mental durante la adolescencia suponen un aumento de la morbimortalidad y la discapacidad.
Se pretende testar la hipótesis de que el bullying y el consumo de sustancias psicoactivas están asociados al estado de ánimo negativo.
Métodos: estudio transversal entre estudiantes de Educación Secundaria Obligatoria (ESO) (n=238) de los institutos de Burela (Lugo). El “estado de ánimo negativo” se definió a partir de los siguientes ítems: sentirse cansado/a, triste, desplazado/a, aburrido/a, desesperanzado/a, nervioso/a o insomne. Como variables independientes se consideraron: el binge drinking, el haber fumado alguna vez tabaco o cannabis, así como sus correspondientes percepciones de peligrosidad. Además, se midió la variable bullying. Se estimaron modelos de regresión de Poisson con varianza robusta y se obtuvieron Razones de Prevalencia (RP).
Resultados: el 10,5% [IC95% (7,2-15,2)] de la población encuestada presentaba estado de ánimo negativo. La nula o baja percepción de peligrosidad para el cannabis [RP=2,6 (1,2-5,5)], haber probado alguna vez esta sustancia adictiva [RP=3,1 (1,1-8,9)] y haber sufrido bullying [RP=4,8 (2,4-9,6)] se asociaban al estado de ánimo negativo.
Conclusiones: sería recomendable crear intervenciones para la mejora de la salud mental durante la adolescencia que tengan en cuenta el consumo de sustancias adictivas y el hecho de haber sufrido bullying.
Objective: mental health problems during adolescence lead to increased morbidity and mortality. We intend to test the hypothesis that bullying and addictive substance use is related to negative mood states.
Methods: We carried out a cross-sectional study among high school students in Burela (Northern Spain) (n=238). “Negative mood state” was defined as experiencing the following: feeling tired, sad, out of place, bored, hopeless, nervous or lacking sleep. Independent variables were binge drinking, having smoked tobacco or cannabis, and the corresponding perceived risk of using them. The variable bullying was also measured. Poisson regression models with robust variance were estimated, and Prevalence Ratios were obtained.
Results: 10.5% [CI 95% (7.2-15.2)] of the students reported suffering negative mood states. Students declaring low perceived risk of cannabis use [PR = 2.6 (1.2-5.5)], having tried this addictive substance at some point [PR = 3.1 (1.1-8.9)] and having suffered bullying [PR = 4.8 (2.4-9.6)] increased the risk of experiencing negative mood states.
Conclusion: It would be advisable to design and implement interventions aimed at improving mental health during adolescence which account for the use of addictive substances and being a victim of bullying