Núria Álvarez Cebreiro, Cristian Abelairas Gómez , Oswaldo García Crespo, Cristina Varela Casal, Antonio Rodríguez Núñez
Introducción El uso de videos parece ser un buen recurso para la difusión de las técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) entre jóvenes y adolescentes.
Objetivo Nuestro objetivo ha sido evaluar el efecto de la creación y difusión de un video formativo en técnicas de RCP y uso del desfibrilador semiautomático en un equipo de fútbol-sala de adolescentes.
Material y métodos Se realizó un estudio prospectivo, analítico y observacional con una muestra de 65 jugadores (entre 12 y 33 años). En primer lugar se evaluaron los conocimientos sobre soporte vital básico con un cuestionario. Posteriormente se divulgó un video hecho ad hoc por medio de redes sociales durante una semana. A continuación un total de 52 sujetos se dividieron en grupo experimental, que vieron el video, y grupo control. Ambos fueron evaluados con un test estandarizado.
Resultados El 55% de la muestra inicial refiere no tener conocimientos y el 81% no sabe cómo usar un desfibrilador semiautomático. Tras la difusión del video, encontramos diferencias estadísticamente significativas entre ambos grupos en cuanto a apertura de vía aérea, profundidad y número de compresiones correctas, mejorando por tanto la calidad de RCP. En cuanto al desfibrilador semiautomático, la descarga efectiva se realiza de media en 85 seg desde la entrega del desfibrilador.
Conclusiones Podemos concluir que la visualización de un video breve mejora la capacidad de respuesta ante una parada cardiorrespiratoria y la calidad de la RCP.
Introduction Using videos seems to be a good option to share cardiopulmonary resuscitation (CPR) techniques.
Aim Our aim was to evaluate the learning effect of viewing a video about why and how to do CPR in young footballers, as well as on how to use an automatic external defibrillator.
Material and methods A prospective, analytical and observational study was conducted that included 65 young footballers (aged between 12 and 33 years old). First of all, basic life support knowledge was assessed using a questionnaire. After that, a video made ad hoc for this study was shared on the social media for a week. Then, 52 of the participants were split into the experimental group (who watched the video), and a control group. Both groups were evaluated using a standardised test scenario.
Results Fifty five per cent of the sample did not have sufficient knowledge, and 81% said that they did not know how to use an automatic external defibrillator. After the video release, a statistical difference was found between both groups in terms of airway opening, depth and correct compressions, thus improving overall CPR quality. The mean time to deliver an effective shock with the automatic external defibrillator was 85 seconds.
Conclusion In conclusion, watching a brief video improves the responsiveness in a cardiac arrest and the CPR quality.