Eduardo José Pedrero Pérez
Objetivo: Explorar las relaciones entre las dimensiones básicas de personalidad, propuestas por el modelo de cinco factores y medidas a través del Big Five Questionnaire (BFQ), y los trastornos de personalidad, estimados dimensional y categorialmente mediante el Millon Clinical Multiaxial Inventory II (MCMIII) en sujetos que se encuentran en tratamiento por abuso o dependencia de sustancias psicoactivas.
Material y método: La muestra está compuesta por 187 sujetos que se encuentran realizando tratamiento ambulatorio por abuso o dependencia de heroína, cocaína, alcohol, cannabis o benzodiazepinas, y que cumplimentan ambos cuestionarios simultáneamente. Se efectúan pruebas de correlación bivariada entre las dimensiones y subdimensiones del BFQ y las escalas de trastornos de personalidad del MCMI-II. Se efectúa posteriormente un análisis de regresión de las dimensiones y subdimensiones del BFQ sobre cada una de las escalas del MCMI-II.
Resultados: Se constata la especial implicación de las dimensiones de Estabilidad Emocional (Neuroticismo) y Energía (Eje Intraversión/Extraversión) en la mayor parte de los desórdenes, si bien cada uno de ellos presenta un patrón peculiar de organización del que participan los cinco rasgos, coherente con lo descrito en otras investigaciones similares y con la formulación teórica de cada trastorno. Finalmente se presentan gráficamente aquéllas relaciones que, según un criterio restrictivo, son confirmadas por ambos métodos, comparándose los resultados con los obtenidos en otros estudios similares.
Discusión: Se argumenta la implicación de estos resultados en la práctica clínica, así como en una posible clasificación dimensional, en el futuro, de los trastornos del Eje II. Se discuten, también, las limitaciones de las clasificaciones y los instrumentos utilizados para la evaluación de estos trastornos.
Conclusiones: Los trastornos de personalidad pueden ser caracterizados a partir de peculiares configuraciones de rasgos, lo que además de tener repercusiones para los sistemas clasificatorios, es de especial relevancia para el diseño de intervenciones psicoterapéuticas y farmacológicas.