Antecedentes: La tomografía computarizada por emisión de positrones (PET/TC) y la biopsia de médula ósea (BMB) son actualmente los exámenes clínicos comunes para valorar la infiltración linfomatosa. El objetivo de este estudio es evaluar el valor de la PET/TC en el diagnóstico de la infiltración de la médula ósea, la estadificación clínica y la tipificación patológica del linfoma.
Métodos: Se analizaron retrospectivamente 153 casos para comparar la consistencia de la PET/TC y la BMB. Analizamos la sensibilidad, la fiabilidad y la especificidad de la PET/TC en las diferentes enfermedades clínicas del linfoma.
Resultados: La sensibilidad de la PET/TC para detectar infiltración de la médula ósea es del 54,3%, con una especificidad del 80,5% y una precisión del 74,5%. En los casos de linfoma agresivo de células B (DLBCL, HG-BL) y MZL, los resultados de la PET/TC para la infiltración de la médula ósea reflejaron una alta precisión del 88,1 y 83,3%, respectivamente. El valor medio SUVmáx en los pacientes en los que se detectó infiltración de la médula ósea mediante BMB fue significativamente superior al de los pacientes con resultados negativos de BMB entre los subgrupos de linfoma agresivo de células B, MZL y T-NHL (p<0,05).
Conclusión: La PET/TC es significativa a la hora de detectar infiltración de la médula ósea en ciertos tipos patológicos de linfoma. Sin embargo, siguen existiendo inconsistencias patológicas entre la biopsia de médula ósea y la PET/TC, aunque esta técnica no puede sustituir por completo a la biopsia.
Background: Positron emission tomography–computed tomography (PET–CT) and bone marrow biopsy are currently the common clinical examination of lymphoma infiltration. The aim of this research is to evaluate the value of PET–CT in diagnosis of bone marrow infiltration, clinical staging and pathological typing of lymphoma.
Methods: 153 cases were analyzed retrospectively to compare the consistency of PET–CT and bone marrow biopsy. We analyzed the sensitivity, accuracy and specificity of PET–CT in different clinical pathology of lymphoma.
Results: The PET–CT sensitivity in detecting bone marrow infiltration is 54.3% with a specificity of 80.5% and accuracy of 74.5%. In aggressive B-cell lymphoma (DLBCL, HG-BL) and MZL, PET–CT results of bone marrow infiltration showed high accuracy of 88.1% and 83.3% respectively. The median value of SUVmax in the patients detected to have bone marrow infiltration by BMB was significantly higher than patients with BMB negative results among subgroups of aggressive B-cell lymphoma, MZL and T-NHL (p<.05).
Conclusion: PET–CT is significant in detecting bone marrow infiltration in certain pathological types of lymphoma. However pathological inconsistencies still exist between bone marrow biopsy and PET–CT, thus PET–CT cannot completely replace biopsy.