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Estefanía Jurado García, Juana Macías-Seda 
, F. León Larios , Mónica Álvarez, Mª del Carmen Mejías Paneque, Mª Regla Prieto González
En la actualidad la violencia de género (VG) continua siendo un grave problema de salud pública que afecta a más del 10% de las mujeres en España, un 3% más que en años anteriores. Concretamente, la sociedad señala a los enfermeros como pieza clave para detectar los casos de violencia de género y los califica de «observadores privilegiados», más aún, los expertos entiende que los Servicios de Salud, destacando la atención primaria de salud, son uno de los principales puntos de detección y manejo de estos casos.
En este contexto disponemos en nuestra comunidad autónoma del “Protocolo andaluz para la actuación sanitaria frente a la VG” que nos ayuda en este cometido ya que se trata de una herramienta ya validada que ha proyectado resultados espectaculares donde se ha implementado. Es por ello que pasado unos años desde su implementación nos planteamos describir la opinión de los profesionales sanitarios de Atención Primaria sobre el uso de protocolos frente a la Violencia de Género en Sevilla capital.
Currently, gender violence (VG) continues to be a serious public health problem that affects more than 10% of women in Spain, 3% more than in previous years. Specifically, the society points to nurses as a key piece to detect cases of gender violence and qualifies them as “privileged observers”, moreover, experts understand that Health Services, highlighting primary health care, are one of the main points of detection and handling of these cases.
In this context we have in our autonomous community the “Andalusian Protocol for health action against the VG” that helps us in this task since it is a validated tool that has projected spectacular results where it has been implemented. That is why, after a few years since its implementation, we set out to describe the opinion of primary care health professionals about the use of protocols against Gender Violence in Seville.
