Laura Gutiérrez Rodríguez, Silvia García Mayor, Daniel Cuesta Lozano, Eva Burgos Fuentes, Susana Rodríguez Gómez, Pedro Sastre Fullana, Joan Ernest de Pedro Gómez , Juan Carlos Higuero Macías, Bibiana Pérez Ardanaz, José Miguel Morales Asencio
Objetivo Analizar la distribución de competencias avanzadas en enfermeras especialistas y enfermeras de práctica avanzada y evaluar su asociación con algunas características de su perfil profesional.
Método Estudio transversal analítico multicéntrico. Se incluyeron enfermeras que ejercían como Enfermeras de Práctica Avanzada y enfermeras Especialistas. Se midió su nivel de competencias avanzadas percibidas, así como variables de caracterización profesional.
Resultados Doscientas setenta y siete enfermeras participaron (149 ejercían práctica avanzada y 128 especialistas), con una media de 13,88 (11,05) años como especialista y 10,48 (5,32) años como Enfermera de Práctica Avanzada. Un 28,8% tenía nivel de máster o doctorado. El 50,2% ejercía en atención primaria, el 24,9% en hospitales y el 22,7% en salud mental. El nivel global autopercibido fue elevado en las distintas competencias, siendo las dimensiones más bajas las de investigación, práctica basada en la evidencia, gestión de la calidad y seguridad y liderazgo y consultoría. Las Enfermeras de Práctica Avanzada obtuvieron mayor nivel competencial de forma global y en las dimensiones de liderazgo y consultoría, relaciones interprofesionales, gestión de cuidados y promoción de salud. No hubo diferencias en función de la experiencia o la posesión de nivel de máster o de doctorado. En las Enfermeras de Práctica Avanzada el contexto de práctica no influía en los niveles competenciales, aunque en las enfermeras especialistas sí, a favor de las que ejercían en salud mental.
Conclusiones Las enfermeras especialistas y de práctica avanzada tienen competencias distintas que deberían ser gestionadas adecuadamente para el desarrollo de los servicios enfermeros avanzados y especializados.
Objective To analyse the distribution of advanced competences in specialist nurses and advanced practice nurses and to evaluate their association with some characteristics of their professional profile.
Method Multicentre analytical cross-sectional study. Nurses who worked as advanced practice nurses and specialist nurses were included. Their level of perceived advanced competences was measured, as well as sociodemographic and professional characterization variables.
Results A total of 277 nurses participated (149 practised as advanced practice nurses and 128 as specialists), with an average of 13.88 (11.05) years as a specialist and 10.48 (5.32) years as an advanced practice nurse. In the sample, 28.8% had a master's or doctorate level qualification, 50.2% worked in Primary Care, 24.9% in hospitals and 22.7% in Mental Health. The self-perceived global level was high in the different competences, the lowest dimensions being research, evidence-based practice, quality and safety management and leadership and consulting. The advanced practice nurses obtained a higher level of competence globally and in the dimensions of leadership and consulting, interprofessional relations, care management, and health promotion. There were no differences based on experience or possession of a master's degree or doctorate. In the advanced practice nurses, the practice context did not influence competence levels, although in the specialist nurses it did, in favour of those practicing in Mental Health.
Conclusions Specialist and advanced practice nurses have different competences that should be adequately managed for the development of advanced and specialist nursing services.