Fernando Sarramea Crespo, María José Jaén Moreno, Vicente Balanzá Martínez, María Isabel Osuna Lucena, José Ángel Alcalá, Francisco Javier Montiel, Cristina Gómez, María Dolores Sánchez, Ana Belén Rico, Justa Redondo Ecija, Susana Gil Flores, Francisca Valdivia, J. Caballero Villarraso, Luis Gutiérrez Rojas
El consumo de tabaco es el principal factor prevenible de mortalidad en pacientes con trastorno bipolar (TB), y las posibles soluciones se encuentran bloqueadas por prejuicios acerca del deseo, posibilidades y riesgos al dejar el consumo de tabaco en estos pacientes. En 8 Centros de Salud Mental se reclutaron consecutivamente pacientes con TB. Los fumadores fueron evaluados antes y después de una intervención breve basada en las 3 As y clasificados según los “estadios de cambio” (EC) y su “disposición para el cambio” (DC). Mediante una regresión lineal múltiple se analizó la evolución del DC y su efecto sobre otras variables independientes (tratamiento farmacológico, historias de síntomas psicóticos, presencia de síntomas de ansiedad, deseo de abandono, capacidad auto-percibida y la percepción subjetiva de funcionamiento cognitivo). Se incluyeron 212 pacientes con TB estabilizados, los fumadores activos (n=101; 47.6%) pasaron a la fase de intervención, y un 80.2% la completaron. Basalmente, 75.2% consideraban la idea de dejar de fumar, después de la intervención breve, el 30.9% de los pacientes progresó en su EC. Se observó un incremento significativo del nivel de DC (53.3 vs 59.3, P=0.019). La autopercepción del rendimiento cognitivo (β=-0.35;P=0.002), el deseo de abandono (β=0.32;P=0.008), la autopercepción de la capacidad para dejar de fumar (β=-0.30;P=0.012), la edad del paciente (β=-0.72;P=0.004), la edad de inicio del tabaquismo (β=0.48;P=0.022) y los años fumando (β=0.48;P=0.025) fueron los factores que influyeron significativamente en la posibilidad de cambio tras la intervención breve. Los fumadores con TB consideran la idea de dejar de fumar y una intervención breve desarrollada en el marco de la atención a la salud mental diaria, mejoraría el nivel de preparación. La disfunción neurocognitiva asociada con el TB podría limitar la disposición de los pacientes a dejar de fumar.
Tobacco consumption is the main preventable factor of mortality in smokers with bipolar disorder (BD), and any possible solutions are often blocked by prejudices over desire, and the possibilities and risks for these patients in giving up tobacco consumption. Adults with BD were recruited at 8 Mental Health Centres. Smokers were evaluated before and after a brief intervention based on the 3 A’s and classified into a ‘Stage of Change’ (SOC) and their ‘Readiness to Change’ (RTC). A multiple linear regression was used to analyze the progression in their RTC and the independent effect of different variables (pharmacological treatment, history of psychotic symptoms, current anxiety symptoms, willingness, self-perceived capacity to quit smoking and subjective perception of cognitive functioning). Of 212 stable patients diagnosed with BD, current smokers (n=101; 47.6%) were included in the intervention phase, and 80.2% completed it.
At baseline, 75.2% were considering the idea of giving up smoking and, after the brief intervention, 30.9% of the patients progressed in their SOC. A significant increase in the level of RTC was observed (53.3 vs 59.3, P=0.019). Perception of cognitive performance (β=- 0.35;P=0.002), the degree of willing to quit (β=0.32;P=0.008), selfperceived capacity to quit tobacco smoking (β=-0.30;P=0.012), the patient’s age (β=-0.72;P=0.004), the age of onset of smoking (β=0.48;P=0.022) and years as a smoker (β=0.48;P=0.025) were all factors that significantly influenced the chances of improving after the short intervention. Smokers with BD consider the idea of quitting and a brief intervention developed in the every day mental health care setting improves the level of readiness. The neurocognitive dysfunction associated with BD may limit patients’ readiness to quit smoking.