Carlos Arturo Cassiani Miranda, Adalberto Campo Arias, Edwin Herazo
Las personas que reúnen criterios para trastornos por consumo de sustancias (TCS) con frecuencia son víctimas del complejo estigma-discriminación (CED), no sólo por parte de la sociedad general, sino también por profesionales de la salud y la presencia de autoestigma. No obstante, la relación de los TCS con factores biológicos predisponentes y condiciones sociales adversas se considera que estos son ‘autoinducidos’. Asimismo, se conoce que en los TCS se presentan cambios biológicos, psicológicos o del desarrollo que menoscaban la decisión de abandono y la persistencia en el consumo, a pesar de las consecuencias negativas físicas, emocionales y sociales. El CED relacionado con el TCS es un estresor que deteriora aún más la calidad de vida de las personas consumidoras y, al mismo tiempo, se configura como una barrera de acceso a servicios de salud. Es necesario diseñar e investigar la efectividad de estrategias para reducir el CED relacionado con TCS en diferentes poblaciones y contextos.
People who meet criteria for substance use disorders (SUD) are often victims of the stigma-discrimination complex (SDC) not only by the general society, but also by health professionals and the presence of self-stigma. However, the relationship of the SUD with predisposing biological factors and adverse social conditions, SUD are considered 'self-induced'. Likewise, it is known that SUD presents biological, psychological or developmental changes that undermine the decision of abandonment and persistence in consumption, despite negative physical, emotional and social consequences. The SDC related to SUD is a stressor that deteriorates the quality of life of consumers and, at the same time, it is configured as a barrier to access to health services. It is necessary to design and investigate the effectiveness of strategies to reduce SDC related to SUD in different populations and settings.