México
Introducción: La malnutrición afecta el crecimiento y desarrollo del ser humano. La falta de conocimiento sobre alimentación y nutrición es uno de los principales desencadenantes de este padecimiento. Este problema afecta a México, acrecentándose en áreas rurales. Objetivos: Evaluar el impacto de un programa educativo para modificar conocimientos, actitudes y prácticas sobre alimentación y nutrición en mujeres adultas campesinas de zonas rurales. Métodos: Se seleccionaron dos comunidades rurales del sur del estado de Yucatán, México. Se hizo un diagnóstico nutricional mediante antropometría asociado al nivel socioeconómico; y se aplicó una Intervención de Orientación Alimentaria con pre y post prueba. Las diferencias entre las variables antropométricas y sociales en cada localidad se calcularon con estadística no paramétrica (χ2). Las calificaciones obtenidas en la pre y postprueba fueron comparadas analizándose en función de la edad, nivel educativo de las participantes y estado civil. Los análisis se facilitaron empleando un paquete estadístico. Resultados: Los datos globales indicaron en promedio, que se trató con mujeres jóvenes, con un nivel educativo bajo, viviendo una relación de pareja bajo el régimen matrimonial, siendo de reducida estatura y mostrando signos de sobrepeso y obesidad el 62.5% de las participantes incidiendo en situaciones de riesgo nutricional. Las calificaciones de la pre y post prueba no se vieron afectadas por la edad de las participantes (p>0,05), pero el nivel educativo influenció a estas variables (p<0,05). El estado civil no afectó significativamente ninguna de las dos calificaciones. La Intervención en Orientación Alimentaria favoreció de manera positiva y significativa cambios sobre conocimientos en alimentación saludable (p< 0,01). Discusión: La aplicación de intervenciones en nutrición como la empleada en este trabajo representan una herramienta importante para coadyuvar a revertir el fenómeno de obesidad manifestado en la población mexicana, sobre todo en el área rural. Esta alternativa de solución debe complementarse con políticas que promuevan la comercialización de alimentos equilibrados y no lo contrario. Conclusiones: La aplicación de una Orientación Alimentaria aumentó significativamente el nivel de conocimientos sobre una alimentación saludable.
Introduction: Malnutrition is a key factor affecting growth and development of humans. Lack of knowledge on feeds and nutrition is one of the main reasons that triggers this problem. Malnutrition affects countries like Mexico being bigger in rural areas. Objective: Evaluate the impact of an educational intervention to modify knowledge, attitudes and practices on feeding and nutrition, in rural female adults. Methods: Two rural communities located in the south of Yucatán State were chosen. A nutritional diagnosis was made by means of anthropometry associated to the socioeconomic level; and a Food Orientation Intervention was applied with pre and post test. The differences between the anthropometric and social variables in each location were estimated using non-parametric statistics (χ2). The grades obtained in the pre and post test were analyzed in function of age, educational level of the participants and their marital status. Analysis were facilitated by the use of a statistical package. Results: Overall data from both communities indicated that, on average target population consisted of young women, with a low educational level, living in a marriage relationship, having a low height and showing 62,5% of them signs of overweight and obesity which induced a nutritional health risk. The pre and post test scores were not affected by the age of the participants (p>0,05), but the educational level influence these variables (p<0,05). Marital status did not significantly affect either score. The educational intervention improved knowledge on the importance of a healthy diet (p<0,01). Discussion: The application of nutrition interventions such as the one used in this work represent an important tool to reverse the phenomenon of obesity affecting the Mexican population, especially in rural areas. This tool must be complemented with policies that promote the commercialization of balanced foods and not the opposite. Conclusions: The implementation of a Food Orientation Intervention program, turned into a significant increase in the level of knowledge of a healthy diet.