Judit Pertíñez, Thais Clusa Gironella
En los últimos años España ha pasado a ser el país de la Unión Europea que más inmigrantes recibe, y ya en el año 2006 la población inmigrante representaba el 6,87 % del total.
Por orden de frecuencia los extranjeros provienen de países latinoamericanos, africanos, europeos no comunitarios, asiáticos, de América del Norte y de Oceanía. Y las comunidades donde los inmigrantes se asientan más son Cataluña, Madrid y Valencia.
Dividimos las sociedades receptoras de inmigración en: asimiladoras, separadoras e interculturales, aunque la mayoría de las veces en las sociedades de acogida se mezclan varias de estas características.
Según la Ley de Extranjería del año 2000, el único requisito para que los inmigrantes puedan ser atendidos por el Sistema Nacional de Salud es estar empadronados en el municipio donde residen. Además, también reconoce el derecho a la asistencia pública de urgencia para enfermedades graves o accidentes y para las embarazadas y los menores de 18 años.
En cuanto a las repercusiones psicológicas de la inmigración, sabemos que ésta comporta pérdidas y tensiones por todo aquello que se deja atrás, lo cual da lugar al duelo migratorio.
Éste se diferencia de los otros duelos por sus caracerísticas de parcialidad, recurrencia y por tratarse de un duelo múltiple. Si los mecanismos de defensa para superar el duelo migratorio no funcionan y el inmigrante tiene síntomas ansiosos, depresivos, somáticos y disociativos decimos que sufre el Síndrome de Ulises.
Cuando trabajamos con grupos migratorios, es esencial individualizar para evitar caer en la generalización y la excesiva culturización. Para ello es conveniente conocer, a grandes rasgos, algunas diferencias socioculturales que explicamos con más detalle en el artículo.
También nos será útil valorar los factores estresantes que actuarán antes, durante y después del proceso migratorio.
Las patologías que puede sufrir la población inmigrante más vulnerable y sobre las cuales debemos conocer algunas peculiaridades son:
las enfermedades reactivas o de adaptación, los problemas de salud sexual y reproductiva, las enfermedades importadas y las enfermedades de base genética.
La dificultad de acceso a los servicios sanitarios, la falta de sensibilización sobre el proceso migratorio como factor de riesgo y las barreras comunicativas entre el profesional sanitario y el paciente pueden llevar a una atención inadecuada. Por este motivo, en el artículo se proponen una serie de actuaciones desde un enfoque multidisciplinar que ayudarán a mejorar la atención al paciente inmigrante.
In recent years, Spain has been found to be the country within the European Union that receives the largest amount of immigrants and already in the year 2006 the immigrant population represented the 6.87% of the whole population.
In order of frequency, the foreigners come from Asian, African, Non-EU countries, LatinAmerican countries, North America and Oceania. And the communities in which the immigrants settle down the most are Catalonia, Madrid and Valencia.
We divide the immigrant-receiving societies in the following ranges: Assimilative, Separative and Intercultural, although most of times the receiving societies mix up different features of theirs.
According to the Spanish Immigration Law of 2000, the only requirement for the immigrants to be assisted within the scope of the National Health Service is to be registered in the municipality in which they reside. Besides, it also recognizes the right to public emergency assistance in cases of serious illnesses or accidents and for the pregnant and under-age people.
As for the psychological repercussions of the immigration, we know that this implies losses and strains for all that is left behind, which gives rise to the migratory grief. This differentiates itself from other griefs through its characteristics of bias, recurrence and because it is a multiple grief. If the defense mechanisms to overcome the migratory grief do not work and the immigrant has anxious, depressive, somatic and dissociative symptoms we determine that he/she suffers from what is been called the Ulysses Syndrome.
When we work with migratory groups it is essential to individualize to avoid falling in the generalization and the excessive education. To this purpose, it is necessary to know, in outline, some sociocultural differences that are exposed with more detail in the article. Also, it will be useful for us to value the stressful factors that will act before, during and after the migratory process.
The pathologies that can be suffered by the most vulnerable immigrant population and on which we should know some peculiarities are:
the reactive and adaptation illnesses, the problems of reproductive and sexual health and, the imported and genetic illnesses.
The difficulty of accessing to healthcare services, the lack of awareness on the migratory process as a risk factor and the communicative barriers between healthcare professionals and patients can lead to an unsuitable assistance. For this reason, a series of actions focused from a multidisciplinar level that will help to improve the assistance to immigrant patients are exposed in this article.