La extracción de muestras sanguíneas para análisis en laboratorio es una técnica habitual en la práctica enfermera.
Con relativa frecuencia se cometen errores en la toma de muestras que conllevan la obtención de resultados erróneos y, en ocasiones, un rechazo de la muestra por el laboratorio, lo que se traduce en una nueva extracción. Es responsabilidad del profesional enfermero prevenir, controlar y minimizar los posibles errores.
El objeto de este trabajo es dar a conocer cuáles son estos errores y sus causas, especialmente las que pueden estar relacionadas con la actuación de los profesionales de Enfermería.