José R. Caeiro Rey, S. Dapía Robleda, Eduardo Vaquero Cervino, L. Roca Ruiz, Manuel Ángel Blanco Ramos
Hoy en día se considera que la resistencia ósea, entendiendo como tal la fuerza necesaria para desencadenar el fracaso biomecánico de un hueso, es el resultado de la integración de dos variables, la cantidad y la calidad ósea, factores dependientes a su vez del remodelado óseo. Mientras la cantidad de hueso depende directamente de su densidad mineral, la calidad del mismo depende de variables tales como la estructuración jerárquica y la composición química del material que lo forma. Cada uno de estos determinantes primarios de la resistencia ósea comprende a su vez una serie de determinantes secundarios, responsables directos de alguna de las propiedades biomecánicas óseas específicas. En conjunto, determinantes primarios y secundarios ayudan a establecer un hueso sano, resistente y biomecánicamente competente, mientras que sus alteraciones son responsables del desarrollo de osteopatías fragilizantes, procesos fisiopatológicos que incrementan el riesgo de fractura.
Nowadays it is considered that bone strength, understanding as so the necessary load to cause a biomechanical failure of bone, it is the result of the integration of two variables, bone mass and bone quality, both related with bone remodelling. While bone mass depends directly on its mineral density, quality of bone depends on variables such as the hierarchic structure and chemical composition of its material. Each one of these bone strength primary determinants include a serial of secondary ones related with some of the specific biomechanical properties of bone. Altogether, primary and secondary determinants, help to establish a healthy, resistant and mechanical competent bone, whereas their alterations produce weakening osteopathies that increase fracture risk.