Presentamos la evolución de 41 pacientes con osteoporosis posmenopáusica que han seguido tratamiento durante más de tres años (86 meses de media). Treinta y cinco pacientes (85%) presentaron incrementos de la densidad mineral ósea (DMO) en columna, con una ganancia media del 21%, siendo los cambios estadísticamente significativos (p<0,005); el 63% mostró incrementos en cadera, pero no fueron significativos. Trece pacientes presentaron alguna fractura por fragilidad y 6 de ellas sufrieron más de un evento. Por orden de frecuencia fueron 8 fracturas vertebrales (19,5%), 5 de la extremidad distal de radio (12%), 3 de húmero (7,5%) y 2 de cadera (5%). El tratamiento más utilizado fue alendronato (71%), seguido de raloxifeno (58%) y risedronato (54%). Utilizando el test de Morisky, el 48% de las pacientes era buena cumplidora. Hemos encontrado correlación entre los aumentos de la DMO y la aparición de fractura, pero no con otros factores de riesgo analizados.
We are going to show the progress of 41 postmenopausal patients who have followed treatment for more than three years (86 months). Assessing several factors such as: development of the bone mineral density (BMD), adherence to therapeutic treatment, incidence of fractures and risk factors. Thirty five patients (85%) showed increases of the BMD in the spine with an average increase of 21%, and presented statistic changes (p<0.005); 63% presented statistic changes in the hip but with not significant increases. Thirteen patients showed some fracture through fragility and 6 of them suffered more than one episode. By order of frequency: vertebral (spinal) fractures 8 (19.5%), radius 5 (12%), epiphysis of humerus 3 (7, 5%) and hip 2 (5%). The most used treatment was alendronate (71%), followed by raloxifene (58%) and risedronate (54%). Using the Morisky test, the 48% of the patients were reliable. We have found correlation between increases of the BMD and risk of fracture, not being found related to other risk factors.