OBJETIVO: Describir la situación de la Valoración Geriátrica Integral (VGI) en nuestro país. SUJETOS, MATERIAL Y MÉTODOS: Estudio descriptivo transversal mediante encuesta semiestructurada telefónica a distintos responsables de unidades y servicios de geriatría, así como de Equipos de Valoración y Cuidados Geriátricos de España, interrogando sobre el uso de instrumentos de VGI en los distintos niveles asistenciales. RESULTADOS: Todos los servicios consultados, 39, usaron instrumentos de VGI. Un 56% diferentes según nivel asistencial, un 39% instrumentos comunes, y en un 5% hubo sólo un nivel. A nivel funcional, el índice de Barthel se usó en 29 (74,3%), el índice de Lawton y Brody en 21 (53,8%), y el índice de Katz en 20 (51,2%). A nivel mental, el Test de Pfeiffer se usó en 22 (56,4%), el Mini Examen Cognoscitivo en 15 (38,4%) y la escala Cruz Roja Mental en 12 (30,7%). Otros ítems evaluados fueron la depresión en 32 (82%) servicios, el equilibrio en 18 (46,1 %) y las úlceras por presión en 12 (30,7%). CONCLUSIONES: Existe una gran heterogeneidad en la metodología de realización de la VGI por parte los distintos servicios de geriatría españoles. La creación de unos estándares comunes consensuados sería un paso imprescindible para homogeneizarla y para optimizar los beneficios que se obtienen de una adecuada VGI.