Los ganglios linfáticos son los órganos del sistema inmune con más capacidad de reacción ante estímulos externos. Existen múltiples condiciones patológicas que hacen aumentar su volumen: infecciones, enfermedades inmunológicas, enfermedades por depósito, neoplasias, etc. El momento en que se debe iniciar el estudio de una adenopatía dependerá de factores como la edad del paciente, el tamaño del ganglio, sus características o el contexto clínico. Siempre debemos comenzar el proceso diagnóstico con la anamnesis y la exploración física que nos orientarán hacia qué otras técnicas complementarias tenemos que recurrir, tales como la analítica de sangre y orina, la radiología, la ecografía, la tomografía axial computarizada, la resonancia nuclear magnética y los estudios histológicos y anatomopatológicos.