La deformidad del raquis que conocemos como escoliosis es una entidad que puede llegar a afectar a un porcentaje importante de la población y que por tanto exige conocimiento de su historia natural y posibles consecuencias si no es tratada; deben diferenciarse aquellas curvas que están asociadas a otras enfermedades (escoliosis secundaria) y también las que no pueden definirse en sentido estricto como escoliosis (posturales, actitudes antiálgicas, histéricas, etc.).
Quizá la labor más importante en la atención primaria de este tipo de anomalía consiste justamente en el hecho de diagnosticarla, mediante la clínica y la exploración, y remitirla al especialista adecuado para su seguimiento