Dolors Camps, M. Sánchez Molins, Josep Mª Ustrell Torrent
El desarrollo posnatal de las estructuras faciales y dentales dura entre 18 y 25 años. Esta larga duración del período de erupción permite que factores genéticos y ambientales influyan sobre la dentición y la armonía facial. No existe un acuerdo total sobre el momento en el que debe tratarse una maloclusión. Sin embargo, se acepta que las intervenciones tempranas están destinadas a eliminar los factores etiológicos que provocan la maloclusión y a tratar las discrepancias transversales, anteroposteriores y verticales. Las intervenciones tempranas pueden contribuir al desarrollo normal de la oclusión y armonía facial, y cuando ha cesado el crecimiento craneofacial las posibilidades terapéuticas son más limitadas.