En la actualidad no cabe duda de la importancia de la nutrición como indicador de salud, por tanto, conocer el estado nutricional de la población anciana permite valorar de forma indirecta su estado de salud, pero también detectar y tratar de forma precoz situaciones de riesgo de malnutrición. Se sabe que las necesidades nutricionales del individuo varían con la edad, aunque aun no ha sido determinado cuál sería el aporte nutricional óptimo para la población anciana.
El objetivo de este trabajo es conocer los cambios que se producen en la nutrición durante el proceso de envejecimiento.
La metodología utilizada ha sido la revisión bibliográfica.
Se analizan los cambios en la composición corporal, en los diferentes órganos y los factores de riesgo de desnutrición, planteándose finalmente distintos tipos de intervención nutricional, concluyendo que el envejecimiento normal no es, por sí mismo, una causa de desnutrición en la población anciana sana.