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Se determinan los niveles plasmáticos de HDL-Colesterol, basales y post-ejercicio máximo, en tres grupos de individuos: controles (n = 12), atletas (n = 10), y pacientes coronarios (n = 1). Los valores básales y post-ejercicio más elevados corresponden al grupo de atletas (basal: 52.30 + 3.53; post-ejercicio: 57.30 + 4.46 mg/100 mi), presentando estos individuos, un incremento estadísticamente significativo, tanto en sus niveles básales como ostejercicio, con respecto a los otros dos grupos (controles y coronarios). Los niveles básales y post-ejercicio más bajos, corresponden al grupo de pacientes coronarios (basal: 38.09 + 2.82; post-ejercicio: 41.00 + 3.61).'No se encontró una diferencia estadísticamente significativa entre los grupos de individuos controles y de pacientes coronarios, tanto en sus niveles básales como post-ejercicio. Tras el ejercicio máximo, la HDL-Co. sufre un incremento que no es estadísticamente significativo en el grupo control, y sí es significativo estadísticamente para el grupo de atletas y el de coronarios. El mayor incremento de HDL-Co. corresponde a los atletas. Estos datos permiten afirmar que al menos en nuestros sujetos, el entrenamiento físico induce la producción de HDL-Co. durante el esfuerzo físico.
