Como elemento que involucra a lo colectivo dentro de las actuaciones de prevención orientadas por los profesionales de la Fisioterapia, se encuentran las acciones promotoras, las cuales deberían especificar los modelos conceptuales sobre los que se apoyan. A partir de esta premisa surge nuestra propuesta, denominada «Modelo integrador para evaluar la eficacia de intervenciones fisioterapéuticas sobre la calidad de vida relacionada con la función», la cual tiene como objetivo principal ayudar a orientar la selección, tanto de medidas de resultado como de las estrategias terapéuticas, en los proyectos planteados desde la Fisioterapia, dentro de determinado tipo de contextos (cuidado informal, atención al paciente crónico, etc). Este modelo va a partir de dos principios fundamentales: la expansión de los modelos basados en el funcionamiento sobre individuos con diferentes condiciones, incluidos aquellos sin diagnósticos claros de deterioro/disfunción, y su complementariedad con experiencias más «humanas» y cercanas a perspectivas «filosóficas» como la calidad de vida o el bienestar. Este modelo, que como es lógico está sometido a discusión, plantea el desarrollo de intervenciones fisioterapéuticas que ayuden a reducir/controlar este deterioro, o a prevenir su riesgo de aparición, a partir de aspectos como el aumento de los recursos de los individuos y/o la atenuación de su vulnerabilidad.