Objetivo. Determinar si el apoyo social influye en el control de la presión arterial en pacientes diagnosticados de hipertensión arterial esencial.
Diseño. Estudio observacional, prospectivo, de seguimiento a un año.
Emplazamiento. Centro de saúde Mariñamansa-A Cuña. Ourense (Galicia). España.
Participantes. Un total de 236 pacientes diagnosticados de hipertensión arterial esencial en control en el centro de salud.
Mediciones. Durante el año de seguimiento se midieron las variables clínicas: edad, sexo, presión arterial, gravedad de la hipertensión, consumo de tabaco, consumo de alcohol, presencia de diabetes mellitus, hipercolesterolemia, índice de masa corporal y cumplimiento del tratamiento.
Asimismo, se determinaron las siguientes variables sociofamiliares: estado civil, nivel cultural, nivel socioeconómico, tipo de familia, acontecimientos vitales estresantes y el apoyo social.
Resultados. La edad media fue de 63,51 (rango, 62,05-64,96) años, y el 66,1% fueron mujeres. La tipología familiar predominante es la familia nuclear (64,3%). El 30,2% de los pacientes refería una baja red social (0-1 contactos sociales). Detectamos un 22% de bajo apoyo social funcional. El apoyo social se mantuvo estable a lo largo del estudio.
Los hipertensos con redes sociales bajas presentan, tras controlar por las posibles variables de confusión, un incremento de la presión arterial sistólica de 9,59 mmHg (rango, 2,67-16,51) y de 4,29 mmHg (rango, 0,44-8,15) en la diastólica, respecto de los pacientes hipertensos con redes sociales más amplias.
Conclusión. Los hipertensos con una baja red social presentan un incremento de las cifras de presión arterial respecto de los hipertensos con redes sociales amplias.