Se estima que, como mínimo, 1 de cada 10 mujeres experimentará depresión posparto, aunque, en la práctica clínica, un cribado sistemático de este aspecto se descuida con demasiada frecuencia. La irrealidad neblinosa de este trastorno afectivo conduce a las mujeres a creer que están perdiendo la razón y sus esfuerzos para encontrar ayuda pueden ser esquivos. Las mujeres con depresión posparto que no son diagnosticadas ni tratadas presentan un riesgo de lesión inmediata y potenciales secuelas durante toda la vida para sí mismas y para sus familias y, especialmente, para sus hijos. Este artículo proporciona una comprensión de la experiencia de la mujer en la depresión posparto; una revisión de dos instrumentos desarrollados mediante un programa de investigación dirigido a detectar este trastorno; cribado en la práctica clínica, y una visión de las tres dimensiones del tratamiento: psicofarmacología, psicoterapia y atención psicosocial. Se proporciona a las matronas y a los profesionales de asistencia primaria las directrices prácticas y la información a la paciente para incorporar un cribado sistemático en la práctica clínica, para identificar equipos de tratamiento interdisciplinarios eficaces y para reunir recursos familiares y comunitarios que ayuden a solucionar esta crisis de cuidados maternos frecuentemente oculta.