Por más tópico que suene bien cierto es que el tabaquismo es la adicción que más patología y muerte provoca en nuestros días, si a esto añadimos que la prevalencia del tabaquismo en los enfermos mentales es de 2 a 3 veces mayor que en la población general, parece clara la necesidad de intervenir con todos los medios a nuestro alcance.
Desde la consulta de la enfermera especialista en salud mental se realizará una intervención intensiva para la deshabituación tabáquica de enfermos mentales derivados a tal efecto por los facultativos especialistas del CSM.
En varias sesiones semanales programadas de antemano se acompañará al paciente en el proceso de reducción nicotínica progresiva con el objetivo principal de lograr la abstinencia y, una vez lograda ésta, sesiones quincenales los dos primeros meses y mensuales hasta completar el año sin consumo.