F. Javier Montañez Aguilera , Daniel Pecos Martín
Con este artículo queremos compartir los resultados obtenidos a partir del empleo combinado de la Técnica de Presión Isquémica en Acortamiento (TPIA) y Técnica de Estiramiento Selectivo (TES) en el tratamiento de esta alteración.
El estudio se realizó con veinticuatro fisioterapeutas y estudiantes de último curso a los que se emparejó (doce parejas) para poder realizar la actividad.
Tras una valoración por parte del fisioterapeuta de su paciente para detectar la existencia o no de un acortamiento a nivel del trapecio (rotación), se procedió al tratamiento combinado y a la posterior valoración de la movilidad para ver resultados.
El 100% de los casos estudiados (veinticuatro) fueron satisfactorios.
Como aspectos destacables de la técnica, cabe resaltar: es manual, comodidad para el paciente y para el fisioterapeuta, técnica no cruenta si se realiza con progresión, rapidez de ejecución, resultado inmediato objetivo (aumento del recorrido articular pasivo-rotación) y subjetivo (paciente que al rotar activamente su cuello experimenta menos tirantez y gana amplitud de giro sin dolor) y su efectividad incluso siendo la primera vez que el fisioterapeuta la emplea (como era el caso de todos los asistentes).