A lo largo de los últimos 20 años, se recomendó a las mujeres químicamente dependientes realizar una programación especializada para mejorar el funcionamiento psicosocial y la permanencia en el tratamiento. Este estudio examina el impacto que ha tenido en un grupo de trabajo estructurado sobre la asertividad y sexualidad en mujeres de tres comunidades basadas en programas de mantenimiento con metadona de 6 semanas de duración. Los resultados obtenidos indican que las mujeres que participaban con frecuencia en grupos de mujeres (de cuatro a seis sesiones) presentaban un aumento mayor en la autoestima y la cognición si las comparamos con las mujeres que no participaban con igual frecuencia (de una a tres sesiones). Además, el nivel de participación se asoció de manera positiva, con el tiempo de permanencia en el programa de tratamiento una vez finalizado el grupo de trabajo.