Introducción: algunas de las técnicas de estiramiento isquiosural descritas en la bibliografía son muy similares a los test neurodinámicos (TNDs), diseñados para valorar la integridad del sistema nervioso. Surge la cuestión sobre la especificidad de dichas técnicas sobre el tejido muscular. Durante los TNDs, la maniobra de diferenciación estructural (DE) permite discriminar si el origen de los síntomas es neural o muscular. Con el mismo propósito, podría incluirse la DE en las técnicas de estiramiento isquiosural como un posible reflejo del origen de la tensión experimentada. Objetivo: describir el efecto de la DE en la sensación de tensión experimentada por sujetos sanos en técnicas de estiramiento y auto-estiramiento isquiosural. Material y método: estudio observacional descriptivo reclutando la muestra de estudiantes y personal de la Universidad de Zaragoza. Se realizaron los estiramientos de elevación de la pierna recta (SLR), extensión pasiva de rodilla (PKE), flexión máxima de cadera (MHF) y se solicitó un auto-estiramiento. En todos ellos, se analizó la respuesta en los síntomas tras la maniobra de DE. Resultados: un total de 54 sujetos (108 extremidades), con una media de edad de 25 ± 4,6 participaron en el estudio. El porcentaje de respuestas musculares fue 26,9 %, 48,8 % y 81,48 % para las técnicas de SLR, PKE y MHF, respectivamente. En el auto-estiramiento el porcentaje de respuestas musculares fue el 20,4 %. Conclusiones: la incorporación de la DE en el procedimiento habitual de estiramiento puede resultar útil para diferenciar el origen de la tensión generada por las técnicas de estiramiento isquiosural. Aquellos estiramientos que utilizan secuencias de movimiento similares a los TNDs son los que mayor número de respuestas de origen neural obtienen y los que utilizan la flexión máxima de la cadera parecen ser los más específicos para el tejido muscular.