Meiremar Cardoso dos Santos, Joana Fornés Vives, Margalida Gili Planas
El hostigamiento psicológico en el trabajo (mobbing) es un problema de considerable magnitud para el personal de enfermería a nivel mundial. Aunque el maltrato psicológico laboral esté basado en comportamientos subjetivos, el elevado número de personas que lo testifica plantea, como mínimo, una mayor reflexión sobre este tema. El objetivo de este estudio es analizar la problemática del mobbing desde el punto de vista exclusivo de los testigos y conocer las repercusiones psicológicas del fenómeno sobre los mismos. Se realizó un estudio descriptivo transversal, usando cuestionarios autoadministrados. La muestra está compuesta de 204 profesionales de enfermería, de los cuales el 28.4% reportaron haber testificado conductas hostiles hacia sus compañeros de trabajo. Las conductas más observadas fueron el desprestigio profesional, la humillación, el rechazo profesional, el ninguneo y el aislamiento profesional. Los resultados demostraron que los testigos de hostigamiento psicológico, aunque no se percibían víctimas de ello, presentaban significativamente más síntomas de estrés que los no testigos, así como un mayor deseo de abandonar la profesión y una mayor percepción de que la enfermería es una profesión poco valorada. Los resultados indican que el mobbing en enfermería es un comportamiento objetivable y que su impacto repercute negativamente en los observadores del mismo, convirtiéndolos en víctimas secundarias del fenómeno.
Psychological harassment at work (mobbing) is considered a worldwide problem of great magnitude for nursing staff. Although hostility is described as a subjective behavior, the large number of witnesses suggests a reflection on the phenomenon. The aim of this study is to analyze the problem of psychological harassment from the point of view of the witnesses, and to find out the psychological impact of this phenomenon on them. We performed a cross-sectional study using self-administered questionnaires. The sample consisted of 204 nurses who were non-victims of mobbing. 28.4% (n = 58) of them reported to have observed hostile behavior toward coworkers. The most observed behaviors were professional discrediting, professional humiliation, rejection, scorn, and professional isolation. It was found that the witnesses of mobbing had significantly more symptoms of stress than non-witnesses, a greater desire to leave the profession, and a greater perception that nursing is an undervalued profession. The results indicate that mobbing in nursing is an objective behavior and its impact reaches observers thereof, who may be secondary victims of the phenomenon. The results indicate that mobbing in nursing is an objective behavior and its impact reaches observers thereof, which could be considered secondary victims of the phenomenon