Daniela Magnani, Giovanni Lionte, Rosaria Di Lorenzo, María Pisani, Cristian Palazzolo, Paola Ferri
A pesar de que numerosos estudios destacan los múltiples beneficios para los pacientes de la UCI Abierta (incluida la menor presencia de complicaciones cardiovascular es y una recuperación más rápida, con menos días de hospital), los profesionales siguen siendo reticentes, debido a una variedad de preocupaciones: un hipotético mayor riesgo de infecciones, interferencias por parte de los familiares con la atención al paciente, aumentando la carga de trabajo del equipo y la limitación de la eficacia de la unidad de cuidados intensivos, aumento de los niveles de estrés para el paciente y los familiares, invasión de la privacidad del paciente.
El presente estudio tiene como objetivo presentar los resultados de la experiencia de algunos médicos y enfermeras en la unidad de cuidados intensivos de un Hospital de la Universidad de Módena, a los 18 meses de la apertura de las varias secciones a los familiares. Se realizó una encuesta cualitativa sobre lo vivido por el personal sanitario, realizada mediante la técnica de grupos focales (focus group) y entrevistas semi-estructuradas. El propósito del estudio fue descubrir los aspectos positivos, pero también las barreras y dificultades como resultado del cambio organizacional. Fueron involu- crados diecisiete enfermeros y cuatro médicos.
Los resultados muestran muchas problemáticas organizativas, pero lo que surge, más allá de las desventajas, es una clara intención de continuar en el camino de abertura, en la creencia de que una estructura abierta aporta muchas ventajas a los pacientes, familiares y hasta a los mismos profesionales, con la condición que hayan reglas claras, bien definidas y compartidas por todo el equipo.
Many studies have highlighted that “open” Intensive Care Unit (ICU) can bring multiple benefits for patients: reduced cardiovascular complications, mortality and length of stay. However, professionals are still reluctant to accept open units because of many concerns: risk of infection, interference with patient care, increased workload for team, redu- ced efficacy of intensive care, increased level of stress for patients and their families, violation of patient privacy.
The aim of this study was to analyze the positive and negative aspects of an open ICU. After 18 months from the reorganization into open modality of the ICU located in the University Hospital Policlinico in Modena, we performed a qualitative research. We applied focus groups technique and semi-structured interviews to 70 nurses and 4 physicians of the open ICU, in order to appraise their evaluation of this organizational change.
Our results evidenced many organizational issues, concerning the difficulty to guarantee the privacy of patients, the necessity of clear, well-defined and shared rules of work and the need of psychological support for the staff due to the higher emotional involvement with patients and their families. Nevertheless, professionals expressed the intention to maintain open ICU, in the belief that it can induce many advantages not only to patients and their families, but also to professionals themselves.