I. Merino Villeneuve
Un alto porcentaje de pacientes acuden a la consulta del pediatra por un problema que tiene una raíz emocional o psicosocial. Para este tipo de pacientes, el pediatra, en muchas ocasiones, no tiene conocimiento suficiente y el sistema público de salud ofrece alternativas escasas. Los conocimientos que la neurociencia, la inteligencia emocional y el mindfulness aportan acerca del funcionamiento de la mente del ser humano permiten un empoderamiento de este, convirtiéndose en dueño de su vida y en responsable de su felicidad, lo que repercute en una mejora en su salud física, emocional y mental. El autoconocimiento, una nueva "vacuna" para la prevención de muchas enfermedades con base emocional.