La principal manifestación de la primoinfección por parvovirus B19 suele ser el eritema infeccioso. La mayoría de las infecciones ocurren durante la infancia y la adolescencia, con una seroprevalencia cercana al 50% a los 20 años de edad. Aunque la infección primaria suele ser leve y de resolución espontánea, en ocasiones puede presentarse de forma atípica, en forma de artropatía, citopenias o distrés respiratorio.