Sergio Bilbao Bagán
Tomando como base los dos modelos biomecánicos más extendidos:
-Modelo biomecánico de Root (1971). Parte de una correcta coordinación neuromotora y de que los tejidos periarticulares deben de proporcionar una información propioceptiva adecuada, además de poseer los músculos una adecuada fuerza y tono.
-Modelo de Stress de tejidos (1999). Basado en las teorías de Kirby (Equilibrio Rotacional ASA, 1987) y Fuller (CoP 1999), que fundamentan su tesis en la teoría de stress de tejidos (Mcpoil y Hunt), teniendo como base este modelo la localización del CoP, con el objetivo de llevar a los tejidos a una fase elástica.
Podemos decir que ambos modelos tienen una consideración del pie como parte de un conjunto, es decir, realizan una valoración ortopodológica holística, integrando al pie dentro de la globalidad del ser humano. Basan su teoría en un correcto funcionamiento de todas las estructuras que integran un ser humano, y a partir de ahí explican una serie de leyes de normalidad o una serie de test clínicos que nos van a dar información sobre nuestro paciente.