Murcia, España
Introducción: La “dieta Mediterránea” está reconocida como uno de los patrones dietéticos más saludables pero, incluso en los países mediterráneos, su seguimiento está disminuyendo. La adolescencia es un período crucial durante el cual se producen cambios en los hábitos alimentarios.
Objetivos: El objetivo de este estudio fue evaluar la adherencia a la dieta Mediterránea (ADM) de los estudiantes de educación secundaria y evaluar las posibles diferencias entre los residentes en la ciudad o en las pedanías.
Métodos: Se diseñó un estudio transversal con 379 estudiantes. Para evaluar la ADM se facilitó el cuestionario KIDMED. Los estudiantes se clasificaron de acuerdo al sexo y la residencia (ciudad o pedanía).
Resultados: El índice de masa corporal (IMC) fue en global de 22.34 en hombres y 20.79 en mujeres (p<0.05). Los estudiantes de ciudad resultaron más activos físicamente que los de pedanías (p<0.05). La puntuación media de ADM fue de 5.8 en el total de los estudiantes, con un 20.3% que mostraron una buena adherencia. En general, hubo un bajo consumo de frutas, verduras y pasta o arroz, todos los alimentos incluidos en la base de la pirámide alimentaria y el consumo de aceite de oliva y legumbres fue positivamente elevado. Alrededor del 25% de los estudiantes no desayunan regularmente.
Conclusiones: A pesar de que el IMC, en general, se sitúa en el rango de la normalidad, la ADM de los estudiantes es menor de lo esperado atendiendo a estudios previos. Es conveniente promover el consumo de frutas y verduras varias veces al día, hacer del desayuno una práctica diaria así como la realización regular de ejercicio físico mediante el planteamiento y diseño de programas de información y actuación para los adolescentes y también para sus padres, ya que en estas etapas de la vida suelen ser los que seleccionan los alimentos que se consumen en el hogar.
Introduction: The “Mediterranean diet” is recognized as one of the healthiest dietary patterns but, even in Mediterranean countries it is gradually being lost. Adolescence is a crucial period for changes in dietary patterns.
Objectives: The purpose of this study was to evaluate the Adherence to Mediterranean diet (AMD) of secondary school students and evaluate possible variations between those residents in the city or in the districts.
Methods: A cross-sectional study was designed with 379 secondary school students. To assess the AMD a self-administered questionnaire KIDMED was used. They were classified according to sex and residence (city or districts).
Results: The body mass index (BMI) for the whole sample was 22.34 in boys and 20.79 in girls (p<0.05). Students from the city resulted more physically active than those from the districts (p<0.05). The average AMD score was 5.8, with 20.3% of students showing good adherence. In general, there was a low consumption of fruits, vegetables and pasta or rice, all foods included in the bottom of the dietary pyramid and the consumption of olive oil and legumes was very positive. Around 25% of students skip breakfast regularly.
Conclusions: Although BMI was in general in the range of normality, AMD of secondary school students is lower than expected attending to previous studies. Consume of fruits and vegetables several times per day, having breakfast daily and regular physical activity should be promoted. Educational and informative activities should be designed for adolescents and also for their parents since in these stages menus at home are usually established by them.