Fundamentos: El modo en el que se consume alcohol en los países mediterráneos se encuentra en proceso de transición. El objetivo de este trabajo es describir los patrones de consumo en la población adulta española según las principales características sociodemográficas. Métodos: Estudio transversal con participantes de 15 años y más utlizando como fuente de información la Encuesta Nacional de Salud (ENS) 2011-2012 (n=20.608). Según la ingesta promedio de alcohol, se clasificó como de alto riesgo el consumo ≥40 g/día de alcohol en hombres o ≥24 g/día en mujeres. Se definió binge drinking el consumo de ≥6 bebidas estándar de alcohol (hombres) y ≥5 (mujeres) en 4-6 horas durante los últimos 12 meses. Se estimó la preferencia de bebida y la tendencia 1987-2012 (ENS respectivas). Se analizó su distribución con variables sociodemográficas mediante modelos ajustados de regresión logística. Resultados: El 1,3% de los sujetos encuestados fueron bebedores promedio de alto riesgo (2% de hombres y 0,7% de mujeres). En hombres fue más frecuente entre los 45-64 años (odds ratio (OR)=2,92 respecto a 15-29 años; IC 95%:1,59-5,38) y en los sujetos nacidos en España (OR=3,45; IC 95%: 1,59-7,69). En mujeres se observaron diferencias estadísticamente significativas según el nivel educativo, incrementándose a medida que aumentaba éste (p tendencia lineal <0,001). El 19,6% de hombres y 7,1% y de mujeres realizaron binge drinking en el último año. Este patrón disminuyó con la edad y se incrementó con el nivel de estudios en ambos sexos (p tendencia lineal <0,001). La prevalencia estandarizada de bebedores promedio de alto riesgo descendió desde un 18,8% en 1987 hasta el 1,3% en 2012. Conclusiones: El consumo de alcohol en España es compatible con el modelo de países en transición, donde el binge drinking es el que más contribuye al riesgo global. Se observa un importante descenso del consumo promedio de alto riesgo. La cerveza desplaza al vino como bebida preferente.
Background: Alcohol consumption in Mediterranean countries is in a transition period. The objective is to describe in the Spanish adult population the pattern of alcohol consumption by major sociodemographic variables. Methods: A cross-sectional study among 20,608 individuals aged ≥15 years who participated in the Spanish Health Interview Survey (ENS) 2011-2012. According to average intake, people were classified as heavy drinkers if they drank ≥40 g/day of alcohol (men) or ≥24 g/day (women). Binge drinking was defined as the consumption of ≥6 standard drinks (men) and ≥5 (women) at any drinking occasion (4-6 hours) in the last year. The beverage preference and the trend for 1987-2012 (ENS of these years) were estimated. The relationship of the distribution of drinking patterns with sociodemographic variables was analyzed using adjusted logistic regression models. Results: The prevalence of heavy drinkers was 1.3% (2% in men and 0.7% in women). In men, heavy drinking was more frequent among 45 to 64 year olds (odds ratio (OR)=2.92 compared to men of 15-29 years; CI 95%: 1.59-5.38) and those born in Spain (OR=3.45; CI 95%: 1.59-7.69). In women, the only differences observed were those regarding education level, with heavy drinking increasing as the level of education increases (p linear trend <0.001). The prevalence of binge drinking during the last year was 19.6% in men and 7.1% in women. In both genders, the risk of binge drinking decreased with age and increased with higher education level (p linear trend <0.001). The standardized prevalence of heavy drinkers has declined from 18.8% in 1987 to 1.3% in 2012. Conclusion: Alcohol consumption in Spain is consistent with the model for countries in transition, where binge drinking is the most common pattern of excessive use of alcohol. A strong decline in heavy drinkers was observed and wine has been displaced by beer in beverage preference.