El retardo de cicatrización es la incapacidad de la piel para autorepararse, debido a la alteración de los mecanismos de cicatrización, lo que conduce a la cronificación de las heridas. Esto explica el comportamiento anormal de úlceras que en principio parecen banales y sin embargo su evolución es muy tórpida, tendiendo a la cronicidad.
Uno de los mecanismos que puede alterar los retardos de cicatrización es la falta de oxígeno a nivel de la lesión, pudiendo llevar a situaciones de hipoxia perilesional.
El oxígeno hiperbárico aumenta el suministro de oxígeno a las heridas que no están respondiendo a otras medidas para tratarlas. En ella los pacientes respiran oxígeno puro (100%) en una cámara hiperbárica especial, aumentando la presión ambiental (superior a 1 atmósfera), administrándose así una mayor presión parcial de oxígeno a los tejidos. (1)