Fundamento y objetivo La trombosis venosa y la trombosis arterial, a pesar de haber sido consideradas durante años como 2 entidades distintas, comparten ciertos factores de riesgo. La dislipidemia es una condición clínica con una prevalencia relativamente elevada en la población, que se ha asociado a un incremento del riesgo trombótico. Los lípidos y lipoproteínas modulan la expresión y/o función de factores trombóticos, fibrinolíticos y reológicos.
Pacientes y método Se ha desarrollado un estudio descriptivo, retrospectivo, comparativo y transversal en el que se ha incluido un grupo de 313 pacientes con enfermedad tromboembólica venosa (ETEV). Se recogieron los datos de filiación básica, factores de riesgo cardiovascular clásicos y complicaciones trombóticas. En todos los pacientes se estudió el perfil lipídico: colesterol total, colesterol unido a high density lipoproteins (HDL, «lipoproteínas de alta densidad»), colesterol unido a low density lipoproteins (LDL, «lipoproteínas de baja densidad») y triglicéridos.
Resultados La dislipidemia es un factor de riesgo para la ETEV, con una odds ratio (OR) de 3,87 (intervalo de confianza del 95% [IC 95%] 2,72-5,56; p < 0,0001). El 31% (n = 97) de los pacientes sufrió un episodio recurrente y el 23% (n = 72) desarrolló síndrome postrombótico. Los valores de colesterol HDL < 35 mg/dl y los de colesterol LDL > 180 mg/dl resultaron ser factores de riesgo para el desarrollo de trombosis recurrente, con una OR de 3,12 (IC 95% 1,35-7,74; p = 0,008) y de 2,35 (IC 95% 1,24-4,45; p = 0,008), respectivamente, y síndrome postrombótico: OR 3,44 (IC 95% 1,43-8,83; p = 0,005) y OR 2,35 (IC 95% 1,24-4,45; p = 0,008).
Conclusiones Existe una asociación entre la dislipidemia y la ETEV, siendo el riesgo de trombosis casi 4 veces mayor en individuos con esta enfermedad. Las alteraciones del perfil lipídico también están relacionadas con una mayor prevalencia de recurrencia y síndrome postrombótico.