Los profesionales sanitarios de los Equipos de Emergencias Extrahospitalarios afrontan situaciones críticas de pacientes que necesitan administración de fármacos y fluidos sin demora para estabilización hemodinámica en el trauma grave u otras enfermedades graves. Las características físicas de los pacientes y las situaciones en las que hay que desarrollar la asistencia requieren dispositivos que permitan reducir el tiempo, complicaciones y efectos adversos y garantizar el éxito de estas técnicas. Además, la técnica debe ser de fácil aprendizaje. Todos estos condicionantes están convirtiendo al taladro eléctrico de unidades móviles en un elemento sencillo, seguro y adecuado para conseguir un acceso al torrente circulatorio.