Mª del Carmen Rodríguez Rodríguez
Nivel de calidad de la Evidencia: II - Grado de recomendación: A Este estudio tiene rasgos que lo hacen muy interesante. El primer lugar, la selección de las participantes: mujeres en fase activa de trabajo de parto. En segundo lugar, el hecho de que las intervenciones que se comparan no son ingesta sí frente a ingesta no, sino ingesta de una bebida isotónica frente al agua.
Hay evidencias que apoyan la ingesta líquida durante el parto. Como señala la autora del comentario, se trata de evaluar adecuadamente el riesgo de cada gestante para evitar sistemáticamente el ayuno impuesto por rutina. Ahora bien, dado que la rutina de nuestro centros implica la dieta absoluta durante el trabajo de parto, hay que ser especialmente cautos con la promoción de la ingesta, pues es evidente que hay una falta de entrenamiento profesional en su manejo. Toda buena práctica debe evitar riesgos innecesarios, lo que no significa hacer de la práctica una rutina coercitiva para el usuario. [ver PREGUNTA CLÍNICA]