La mayor parte de la ayuda que se proporciona a los enfermos dependientes proviene de los cuidadores familiares quienes, debido a las enormes demandas que han de soportar, se encuentran sometidos a una situación de estrés crónico negativo para su salud.
Como recursos que se dispone para mejorar la salud de los cuidadores se encuentra un adecuado apoyo familiar, acompañado de un apoyo social (centro de estancia diurna, unidades de respiro, servicio de ayuda a domicilio), unido al apoyo del personal sanitario.
Se presenta el caso de una cuidadora captada mediante el informe de continuidad de cuidados de su madre, al ser intervenida de cataratas, presentando además deterioro cognitivo.
La cuidadora presentó como diagnóstico enfermero cansancio en el desempeño del rol de cuidador. Tras el correspondiente plan de cuidados se consiguió mejorar la situación de la cuidadora, fundamentado en el apoyo social, ya que la madre comenzó a acudir a un centro de estancia diurna y las intervenciones del personal sanitario, adiestrándola en los cuidados más apropiados a este tipo de pacientes.