Durante la hospitalización el paciente se enfrenta a una serie de riesgos que ponen en juego su integridad y seguridad, dentro de ellos están las caídas, las cuales complican el estado de la persona, ya que en algunas oportunidades se presentan lesiones o fracturas derivadas del trauma, que prolongan la estancia hospitalaria y en casos graves pueden conllevar a la muerte, generando en el usuario y su familia insatisfacción de la calidad de la atención. Muchas de las caídas se pueden prevenir si tenemos presente que una de las principales acciones es la valoración integral del paciente al ingreso y durante su hospitalización, con el fin de detectar los factores de riesgo, tanto inherentes a la persona como del medio e instaurar medidas de control, con el compromiso de todo el personal que interviene en la atención del paciente, el acompañamiento familiar, la implementación de planes de cuidado que respondan a las necesidades detectadas y la garantía de un medio hospitalario seguro. La determinación del perfil del paciente con riesgo de caídas y la aplicación de una escala de valoración de riesgo permite al personal de enfermería implementar medidas individualizadas de prevención, con el fin de brindar una atención segura.