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Con este artículo, pretendemos dar a conocer el caso de un paciente con cáncer de cabeza-cuello (cáncer de lengua estadio IV), al que se le realizó una gastrostomía y a los diez días tuvo que ser ingresado por presentar infección del estoma.
El papel de la enfermera es fundamental para la prestación de los cuidados y para educar al paciente y sus cuidadores. En este caso se han trabajado los diagnósticos enfermeros: temor, disposición para mejorar el régimen terapéutico y conocimientos deficientes: nutrición. Los problemas de colaboración: dolor, infección, nauseas y vómitos y los problemas de autonomía: movilidad, aseo, vestido y eliminación. Todo ello según el Modelo conceptual enfermero de Virginia Henderson, utilizando taxonomías NANDA (North American Nursing Diagnosis Association), NIC (Nursing Interventions Classification) y NOC (Nursing Outcomes Classification).
Este caso pretende demostrar la utilidad de la atención y enseñanza continuada dirigidos a los pacientes y sus cuidadores de forma individualizada y adaptada a sus propias necesidades.
