La encefalopatía hipóxico-isquémica es un problema sanitario relevante debido a las secuelas que puede originar en el recién nacido, el tratamiento con hipotermia inducida se presenta como efecto neuroprotector.
Se ha realizado una revisión bibliográfica sobre la actuación enfermera ante la hipotermia en neonatos con encefalopatía hipóxico-isquémica.
El éxito de este tratamiento requiere del esfuerzo por parte de un equipo multidisciplinar. Es necesaria una monitorización continua y estricta del neonato, además de una formación adecuada del equipo asistencial. Existe poca bibliografía en la que se exponga la actuación de enfermería.
A falta de otra alternativa que ofrezca los mismos resultados, la hipotermia es cada vez una práctica clínica más usual. Al ser esencial la estricta monitorización del paciente, es un reto asistencial para enfermería, que debe ser consciente de la necesidad de protocolizar su actuación para la consecución de unos resultados satisfactorios en el neonato.