Se sabe que la epidemia actual de obesidad ha coincidido con un profundo cambio de hábitos de la población, tanto a nivel de actividad física como de patrones alimentarios y que los cambios demográficos y culturales han afectado el comportamiento de los seres humanos en múltiples vías. Por otra parte, a obesidad es una enfermedad crónica, compleja y multifactorial, que suele iniciarse en la infancia y la adolescencia, y que tiene su origen en una interacción genética y ambiental, siendo más importante la parte ambiental o conductual, que se establece por un desequilibrio entre la ingesta y el gasto energético. Sin embargo, es muy simplista pensar que la obesidad sólo se debe a un consumo excesivo y/o a una actividad física deficiente. En la actualidad hay abiertas diversas vías de investigación en cuanto a los factores causantes de la obesidad, mereciendo especial atención dentro de los mismos la nutrigenómica y la microbiótica.