Las dietas trituradas son unas de las dietas más utilizadas en hospitales y residencias de ancianos. Estas dietas elaboradas de manera tradicional pueden tener un bajo valor nutricional, especialmente suelen tener bajo contenido en energía y proteínas. Su uso continuado puede provocar déficits nutricionales y comprometer el estado nutricional del paciente. Durante las últimas décadas hemos visto cómo la tecnología ha evolucionado y ahora es posible encontrar en el mercado productos industriales con un completo valor nutricional y una textura adecuada para la deglución del paciente. Estos productos son fáciles de preparar y servir, por lo que su inclusión en las cocinas hospitalarias aporta grandes ventajas.