C. Oreja Sánchez, M. V. Vicente Blanco, M. J. Trancon Bergas, N. Montes Carrasco, José Ignacio Calvo Arenillas
Introducción: el hombro doloroso es una complicación muy frecuente tras un ictus, siendo la subluxación glenohumeral su causa más habitual. Existen diferentes opciones preventivas y terapéuticas; entre ellas, la estimulación eléctrica parece tener efectos beneficiosos sobre el dolor, el grado de subluxación y el rango articular. Objetivo: descripción de un caso clínico y presentación de los resultados obtenidos tras abordar con electroestimulación (EE) subluxación, dolor y rango articular pasivo. Presentación del caso: estudio descriptivo del caso clínico de un paciente con ictus, en la unidad de Fisioterapia Neurológica del Servicio de Rehabilitación del Hospital Universitario de Salamanca, al que se le aplica estimulación eléctrica neuromuscular (EENM) durante veinte sesiones a días alternos, sobre los músculos supraespinoso y deltoides posterior y neuroestimulación eléctrica transcutánea (TENS) diariamente sobre los puntos dolorosos del hombro, valorándose semanalmente el dolor a la palpación, rango articular pasivo no doloroso y grado de subluxación. Resultados: desaparición del dolor, mejoría del balance articular pasivo y grado de subluxación durante el tratamiento. Discusión: la TENS se muestra efectiva en el tratamiento del dolor a corto y largo plazo, mientras la EENM sólo posee efecto beneficioso sobre la subluxación y el rango articular pasivo durante el periodo de tratamiento.