El envejecimiento es un reto común en la Unión Europea, que incrementará la necesidad de ayuda a domicilio y el consumo de servicios sanitarios, presionando con ello nuestro sistema de bienestar. Una visión más colaborativa, integrada y centrada en el paciente-ciudadano parece ofrecer una respuesta más sostenible y eficiente a los modelos actuales. Abordajes innovadores para la patología crónica y la prevención del deterioro funcional permitirán vivir más y con mejor calidad de vida. Para hacer realidad el potencial beneficio de estas intervenciones, la Comisión Europea, en su política de «Unión para la innovación», ha lanzado la iniciativa «Cooperación para la innovación europea en el envejecimiento activo y saludable». La promoción de la participación y la colaboración de todos los actores en la cadena de cuidados son esenciales. Este artículo describe el fundamento teórico, el desarrollo de la iniciativa, sus expectativas y las primeras acciones.