El presente trabajo pretende abrir un marco de reflexión acerca de la relación existente entre 2 especialidades próximas como son la geriatría y la atención paliativa. En la medicina actual, con el envejecimiento progresivo de la población, alrededor del 80% de las muertes tienen lugar en edades muy avanzadas y, un porcentaje muy elevado de las mismas son potencialmente susceptibles en sus estadios finales de recibir una atención paliativa. Las reflexiones que se ofrecen en esta exposición se llevan a cabo desde la perspectiva de alguien que ha venido trabajando siempre en el campo de la geriatría. A lo largo de las mismas se enumeran y comentan algunos de los puntos comunes existentes en el devenir histórico de ambas especialidades. También las interrelaciones y puntos de confluencia en otros campos como pueden ser su forma de entender la atención médica, los objetivos clínicos, las bases doctrinales, la metodología de trabajo o la superposición de algunos de los elementos formativos. Se comentan igualmente diversos aspectos diferenciales sobre estos mismos puntos. Se concluye con una llamada a la colaboración entre los especialistas de uno y otro campo, así como en la necesidad de reclamar ante las administraciones sanitarias una implantación más amplia de equipos paliativos en el conjunto de los hospitales del país.
This article attempts to provide a framework for reflection on the relationships between 2 close specialties, such as geriatrics and palliative care. In medicine today, with the progressive ageing of the population, 80% of deaths occur at a very advanced age, and a high percentage of these are potentially likely to receive palliative care in their final stages. The reflections offered in this presentation are made from a perspective of someone who has always worked in the geriatrics field. Throughout this article, some the common points in the historic evolution of both specialities are made and discussed. The inter-relationships and common ground in other fields may be, their form of understanding medical care, clinical objectives, doctrinal bases, the work methodology, or the overlapping of some elements of training. Several aspects of where they differ on these same points are also discussed. It is concluded with a call for collaboration between the specialists of both fields, as well as in the need to demand that the health administrations introduce larger palliative teams in all hospitals in the country.