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María Isis Atallah González
resentamos el caso de una mujer de 18 años, sin antecedentes personales de interés, que acude a la consulta de atención primaria por una lesión facial de un mes de evolución que no era dolorosa ni pruriginosa (fig. 1). Una semana más tarde, refiere la aparición de manchas blanquecinas en las piernas (fig. 2) y lesiones genitales no dolorosas (fig. 3). Figura 1. Lesión anular facial. Figura 2. Leucoplasia sifilítica. Figura 3. Condilomas planos. El diagnóstico fue clínico, las lesiones de nuestra paciente son características de la sífilis secundaria1: una lesión anular facial, una leucoplasia sifilítica y condilomas planos en región genital. Imágenes idénticas a las de nuestra paciente se encontraron en el Manual de Treponematosis de la Organización Mundial de la Salud de 19841. La sospecha de sífilis se confirmó mediante serología de lúes, y se descartó la presencia de otras enfermedades de transmisión sexual como hepatitis B, C, virus de la inmunodeficiencia humana, herpesvirus y citomegalovirus. El diagnóstico diferencial inicial de la lesión facial debe realizarse, principalmente, con las micosis cutáneas: pitiriasis versicolor, pitiriasis alba y herpes circinado. Comentario La sífilis es una enfermedad de transmisión sexual infecciosa crónica producida por la bacteria espiroqueta Treponema pallidum (T. pallidum). La prevalencia de la sífilis se ha triplicado en España en los últimos 10 años2 debido a cambios en las conductas sociales, al menor uso del preservativo y a las corrientes migratorias. El chancro primario aparece...
