Carlos Alberto Encinas Ullán, R. Fernández Fernández, J.C. Rubio Suárez, Enrique Gil Garay
Objetivo Las fracturas de pilón tibial constituyen una de las lesiones más difíciles de tratar en cirugía ortopédica. Los nuevos protocolos y las modernas placas pueden mejorar los resultados. Comparamos los resultados y la tasa de complicaciones entre el abordaje anteromedial y anterolateral para la reducción abierta y fijación interna.
Material y métodos Se estudiaron de forma prospectiva 40 pacientes tratados mediante reducción abierta y fijación interna entre 2007 y 2008. El abordaje fue seleccionado por el cirujano, dependiendo del patrón de fractura y de la situación de la piel. Los pacientes fueron evaluados clínica y radiológicamente por un cirujano independiente, utilizando criterios clínicos (puntuación de la Sociedad Americana de Ortopedia de Pie y Tobillo) y radiológicos a un mínimo de 2 años. Se registró la aparición de complicaciones de ambos abordajes.
Resultados Cuarenta pacientes fueron incluidos. La media de edad fue de 53 años, había 24 hombres y 16 mujeres, 17 fracturas fueron de alta energía y hubo 8 abiertas (3 de tipo i , 4 de tipo ii I y una de tipo iii ), y 12 de las lesiones cerradas eran de grado ii o iii de la clasificación de Tscherne. Seis pacientes (15%) presentaron lesiones asociadas. Al final del seguimiento hubo 33 (82%) resultados excelentes o buenos. No se encontraron diferencias estadísticas entre ambos abordajes con respecto al tiempo de consolidación, tasa de retardo de consolidación y tasa de infección. Fueron extraídas tres placas anteromediales y ninguna anterolateral.
Conclusión La reducción abierta y fijación interna de la fractura de pilón tibial proporciona buenos resultados; no se pudo encontrar diferencias estadísticas entre los abordajes anteromedial y anterolateral. Los resultados clínicos y radiológicos y la tasa de complicaciones se relacionan principalmente con el tipo de fractura.