Marta Lizarbe Chocarro
En España, el número de pacientes que precisa de soporte nutricional artificial va en aumento y en el caso de la nutrición enteral domiciliaria existe una clara tendencia ascendente en el tiempo, siendo la gastrostomía la técnica que se implanta para solventar el problema de la alimentación artificial a largo plazo. El Registro de nutrición artificial domiciliaria y ambulatoria (NADYA), dependiente de la Sociedad Española de Nutrición Parenteral y Enteral (SENPE), indica que en el año 2009 se incrementó en un 5,11% el número de intervenciones de nutrición enteral domiciliaria, habiendo aumentado el número de pacientes con patologías neurológicas por encima de las patologías oncológicas, y de ambas sobre las demás. De ellos, el 21,19% se correspondían a nutrición enteral (NE) por sonda de gastrostomía.
El profesional enfermero es parte implicada en todo el proceso de atención del paciente y su papel tiene cada vez más importancia, siendo necesaria una buena preparación a fin de contar con el conocimiento suficiente para afrontar dicho cuidado a través de una atención de calidad. Este trabajo se ha realizado con el fin de contribuir a incrementar los conocimientos en este campo y aplicar un mejor cuidado enfermero. Para ello se ha descrito brevemente la evolución histórica, las indicaciones y las diferentes técnicas de realización de una gastrostomía, centrándose en la gastrostomía radiológica percutánea.
Se presenta la experiencia del Complejo Hospitalario de Navarra, el protocolo de actuación rápida que se implantó en el servicio de urgencias de dicho centro, los cuidados enfermeros aplicados y ciertos consejos de vigilancia fruto de la reflexión y la praxis enfermera dentro del Servicio de Radiología Vascular Intervencionista.