Narcís Esteva Moreno, Anabel Rodríguez Martín
Introducción: Las necesidades asistenciales que cada vez con más frecuencia requieren una respuesta rápida, efectiva y fiable hacen que la RVI Radiología Vascular Intervencionista, juegue cada vez más un papel preponderante en el abanico de posibilidades terapéuticas que deben dar respuesta al sangrado agudo del aparato digestivo. La existencia de enfermos con múltiples patologías que puedan descartar la cirugía como medio de tratamiento, hacen de las técnicas mínimamente invasivas el medio idóneo para el tratamiento de la HDB.
Objetivo. Principalmente dar a conocer y divulgar los avances en el diagnóstico y tratamiento de la hemorragia digestiva baja (HDB) que aporta la Radiología Vascular Intervencionista (RVI) poniendo de relieve la gran capacidad resolutiva y terapéutica de los mismos así como el papel que desempeña la enfermería radiológica en el desarrollo de estos procedimientos. Destacar también la idoneidad de estos procedimientos frente al tradicional tratamiento quirúrgico que no siempre es posible realizar Técnica. La canalización de una arteria apta para el procedimiento Diagnóstico terapéutico y el acceso a los troncos digestivos con un catéter adecuado es un procedimiento relativamente rápido y económico que nos permite establecer un diagnóstico delimitando el grado y magnitud de las lesiones causantes del sangrado. Hay ocasiones en que se requiere el uso de un micro catéter para hacer un tratamiento lo más selectivo posible evitando así lesiones isquémicas. Cada caso requerirá una estrategia distinta según la importancia y localización de la lesión. El uso de catéteres, guías y material de embolización, permite que en un corto espacio de tiempo podamos, además de establecer el diagnóstico, tratar la lesión o lesiones causantes de la HDB.
Conclusiones. La HDB con o sin repercusión hemodinámica, la angiografía es el método más práctico y rápido, ofreciendo además la posibilidad de tratar las lesiones hemorrágicas que comprometen la estabilidad hemodinámica del paciente. Hay que destacar que frente a la cirugía es un método menos cruento que lo convierte en la solución terapéutica más idónea y rápida para esta patología. Hay que destacar el papel de la enfermería en estos procedimientos, en los que se requiere un alto grado de destreza profesional para dar una respuesta rápida a la necesidad terapéutica, condiciones que solo se pueden dar si se cuenta con profesionales altamente cualificados. La enfermería de RVI es una pieza fundamental del equipo La enfermería de RVI, deberá cuidar del confort del paciente en el caso del circulante y en el caso del que instrumenta, conocer la anatomía, el procedimiento y el material necesario así como su preparación.